Miradas bañadas en gris monotonìa,
que se desvanecen, frìas y perdidas,
y tan silenciosos laten nuestros cuerpos,
que en la indiferencia, saben a agonìa.
Mudas las palabras quieren anidarse,
y heridos los labios yacen en su sed,
las manos reclaman aquella tersura,
y la piel implora cubrirse en tu miel.
Viajan mis suspiros en tiesa tristeza,
y en esa tristeza regresa el ayer,
en dìas de lluvia, traigo a mì, tu nombre,
y el adiòs me quiebra, una y otra vez...
RAQUEL MARTINEZ
Der Reservados 2010.-
MUY BUENO TU BLOG TE ENVITO A VISITAR Y SEGUIR MI BLOG GRACIAS...JOSE MONAZA
ResponderEliminar